—¿Cuándo y cómo se produjo la doctrina de la Trinidad?
Los primeros tres artículos de esta serie mostraron que ni Jesús ni sus discípulos ni los primitivos Padres de la Iglesia enseñaron la doctrina de la Trinidad (La Atalaya del 1 de noviembre de 1991, 1 de febrero de 1992 y 1 de abril de 1992). Este último artículo considerará cómo se desarrolló el dogma de la Trinidad y qué papel desempeñó el Concilio de Nicea de 325 E.C.
EN EL año 325 E.C., el emperador romano Constantino convocó un concilio de obispos en la ciudad de Nicea, Asia Menor. Su objetivo era zanjar las continuas disputas religiosas sobre la relación del Hijo de Dios con el Dios Todopoderoso. Respecto a los resultados de ese concilio, la Encyclopædia Britannica dice:
¿Estableció la doctrina de la Trinidad?
¿Estableció o confirmó la Trinidad como una doctrina de la cristiandad el Concilio de Nicea? Muchas personas suponen que así fue. Pero los hechos muestran lo contrario.
El credo que ese concilio promulgó ciertamente sostuvo varias ideas acerca del Hijo de Dios que permitirían a diversos clérigos considerarlo en cierto modo igual al Dios Padre. Sin embargo, es instructivo ver lo que no dijo el Credo de Nicea. Según se publicó originalmente, el credo entero decía:
Como mucho, ese credo iguala al Hijo con el Padre cuando dice que el Hijo es “consustancial” a él. Pero no afirma nada parecido acerca del espíritu santo. Lo único que dice es que “creemos [...] en el Espíritu Santo”. Esa no es la doctrina de la Trinidad que enseña la cristiandad.
Ni siquiera la expresión clave “consustancial” (ho·mo·óu·si·os) quiso decir necesariamente que el concilio creía en una igualdad numérica de Padre e Hijo. La New Catholic Encyclopedia informa:
“Es dudoso que el Concilio tuviera la intención de confirmar la identidad numérica de la sustancia de Padre e Hijo”4.
Aunque el concilio hubiera querido decir que el Hijo y el Padre eran uno numéricamente, todavía no habría una Trinidad. Solo habría un Dios de dos en uno, no de tres en uno como lo precisa la doctrina de la Trinidad.
“El punto de vista de una minoría”
En Nicea, ¿creían los obispos en general que el Hijo era igual a Dios? No, había puntos de vista en conflicto. Por ejemplo, uno de ellos lo representaba Arrio, quien enseñaba que el Hijo había tenido un comienzo finito en el tiempo y por lo tanto no era igual a Dios, sino que estaba subordinado en todo sentido. Por otro lado, Atanasio creía que el Hijo era igual a Dios en cierto modo. Y había otros puntos de vista.
Martin Marty declara en cuanto a la decisión que el concilio tomó respecto a considerar que el Hijo era de la misma sustancia (consustancial) que Dios: “Nicea en realidad representó el punto de vista de una minoría; el acuerdo fue molesto e inaceptable para muchos que no compartían el parecer arriano”5. De igual manera, el libro A Select Library of Nicene and Post-Nicene Fathers of the Christian Church (Biblioteca escogida de padres nicenos y posnicenos de la iglesia cristiana) menciona que “solo una minoría adoptó la posición doctrinal formulada con claridad que contrastaba con el arrianismo, aunque tal minoría triunfó”6. Y A Short History of Christian Doctrine indica:
De modo que es inexacto afirmar que el Concilio de Nicea de 325 E.C. estableció o confirmó la doctrina de la Trinidad. Lo que luego llegó a ser la enseñanza de la Trinidad no existía en aquel tiempo. La idea de que el Padre, el Hijo y el espíritu santo eran cada uno el Dios verdadero y eran iguales en eternidad, poder, posición y sabiduría aunque un solo Dios —un Dios de tres en uno— no se produjo en ese concilio ni fue formulada por los primitivos Padres de la Iglesia. Como declara The Church of the First Three Centuries:
En 381 E.C., el Concilio de Constantinopla confirmó el Credo de Nicea. Y le añadió algo. Llamó al espíritu santo “Señor y dador de vida”. El credo ampliado de 381 E.C. (que es sustancialmente el que se usa hoy en las iglesias y al que se llama “el credo niceno”) muestra que la cristiandad estaba a punto de formular un dogma trinitario desarrollado. No obstante, ni siquiera este concilio completó esa doctrina. La New Catholic Encyclopedia reconoce:
Aun después de lo acordado en Constantinopla, pasaron siglos antes de que la enseñanza de la Trinidad se aceptara a través de toda la cristiandad. La New Catholic Encyclopedia dice: “En el Occidente [...] parece haber predominado un silencio general con respecto a Constantinopla I y su credo”14. Esta fuente muestra que el credo de ese concilio no se reconoció en todas partes del Occidente sino hasta el siglo VII o el VIII.
En círculos eruditos también se reconoce que el Credo de Atanasio, que con frecuencia se cita como definición y apoyo normales de la Trinidad, no fue escrito por Atanasio, sino por un autor desconocido mucho tiempo después. The New Encyclopædia Britannica comenta:
La doctrina de la Trinidad tuvo una lenta evolución durante un período de siglos. Las ideas trinitarias de filósofos griegos como Platón, que vivieron varios siglos antes de Cristo, se introdujeron furtiva y gradualmente en las enseñanzas eclesiásticas. Como dice The Church of the First Three Centuries:
La misma palabra “Trinidad” solo se aceptó paulatinamente. En la segunda mitad del siglo segundo, Teófilo, obispo de Antioquía de Siria, escribió en griego e introdujo la palabra tri·ás, que significa “tríada” o “trinidad”. Luego el escritor latino Tertuliano, de Cartago, en el África septentrional, introdujo en sus escritos la palabra trinitas, que significa “trinidad”. Pero la palabra tri·ás no se encuentra en las Escrituras Griegas Cristianas inspiradas, y la palabra trinitas no se halla en la traducción latina de la Biblia conocida como la Vulgata. Ninguna de esas expresiones era bíblica. Pero la palabra “Trinidad”, basada en conceptos paganos, se introdujo furtivamente en la literatura de las iglesias, y después del siglo IV llegó a ser parte de su dogma.
Por eso, no se trata de que los eruditos hubieran examinado la Biblia cabalmente para ver si en ella se enseñaba esa doctrina. Más bien, la política seglar y la eclesiástica determinaron en gran parte la doctrina. En el libro The Christian Tradition (La tradición cristiana), el autor, Jaroslav Pelikan, llama la atención sobre “los factores no teológicos de la controversia, muchos de los cuales parecían estar listos vez tras vez para determinar su resultado, solo para que los contrapesaran otras fuerzas de igual importancia. A menudo la doctrina pareció ser la víctima —o el producto— de la política eclesiástica y de conflictos de personalidad”17. El señor E. Washburn Hopkins, profesor de Yale, lo expresó así: “La definición ortodoxa final de la trinidad fue en gran parte un asunto de política eclesiástica”18.
¡Qué irrazonable es la doctrina de la Trinidad en comparación con la enseñanza bíblica sencilla de que Dios es supremo y no tiene igual! Como dice Dios: “¿A quién me asemejarán ustedes o me harán igual o me compararán, para que nos parezcamos uno al otro?”. (Isaías 46:5.)
Qué representó
¿Qué representó la evolución gradual del concepto de la Trinidad? Fue parte de la apostasía del cristianismo verdadero que predijo Jesús. (Mateo 13:24-43.) El apóstol Pablo también había predicho la apostasía venidera:
“Vendrá tiempo en que no soportarán la enseñanza sana, sino que, llevados del propio capricho, se rodearán de maestros para que les halaguen el oído, y dejarán de escuchar la verdad, volviéndose de nuevo a los mitos”. (2 Timoteo 4:3, 4, La Biblia, versión católica de Serafín de Ausejo.)
Uno de esos mitos fue la enseñanza de la Trinidad. Algunos otros mitos ajenos al cristianismo que también se produjeron gradualmente fueron: la inmortalidad inherente del alma humana, el purgatorio, el limbo y el tormento eterno en un infierno de fuego.
Entonces, ¿qué es la doctrina de la Trinidad? En realidad es una doctrina pagana que se hace pasar por cristiana. Satanás la fomentó para engañar a la gente con el fin de que les pareciera que Dios era confuso y misterioso. Esto lleva a que las personas también estén más dispuestas a aceptar otras ideas religiosas falsas y prácticas incorrectas.
“Por sus frutos”
En Mateo 7:15-19 Jesús dijo que se podía distinguir entre la religión falsa y la religión verdadera de este modo:
“Guárdense de los falsos profetas que vienen a ustedes en ropa de oveja, pero por dentro son lobos voraces. Por sus frutos los reconocerán. Nunca se recogen uvas de espinos o higos de cardos, ¿verdad? Así mismo, todo árbol bueno produce fruto excelente, pero todo árbol podrido produce fruto inservible [...]. Todo árbol que no produce fruto excelente llega a ser cortado y echado al fuego”.
Examine un ejemplo. Jesús dijo en Juan 13:35: “En esto todos conocerán que ustedes son mis discípulos, si tienen amor entre sí”. Además, en 1 Juan 4:20 y 21 la Palabra inspirada de Dios declara:
“Si alguno hace la declaración: ‘Yo amo a Dios’, y sin embargo está odiando a su hermano, es mentiroso. Porque el que no ama a su hermano, a quien ha visto, no puede estar amando a Dios, a quien no ha visto. Y este mandamiento lo tenemos de él, que el que ama a Dios esté amando también a su hermano”.
Aplique el principio fundamental de que los cristianos verdaderos tienen que amarse entre sí a lo que ocurrió en ambas guerras mundiales de este siglo, así como en otros conflictos. Personas de las mismas religiones de la cristiandad se encontraron en los campos de batalla y se mataron unas a otras por diferencias nacionalistas. Cada lado alegó que era cristiano y recibió el apoyo de sus clérigos, quienes afirmaron que Dios estaba de su lado. Tal matanza de un “cristiano” por otro “cristiano” es fruto podrido. Es una violación del amor cristiano, un rechazo de las leyes de Dios. (Véase también 1 Juan 3:10-12.)
Un día de ajuste de cuentas
Así que, el que se apostatara del cristianismo no solo llevó a creencias impías, como la doctrina de la Trinidad, sino también a prácticas impías. Sin embargo, habrá un día de ajuste de cuentas, pues Jesús dijo: “Todo árbol que no produce fruto excelente llega a ser cortado y echado al fuego”. Por eso la Palabra de Dios exhorta:
“Sálganse de ella [la religión falsa], pueblo mío, si no quieren participar con ella en sus pecados, y si no quieren recibir parte de sus plagas. Porque sus pecados se han amontonado hasta llegar al cielo, y Dios ha recordado sus actos de injusticia”. (Revelación 18:4, 5.)
Dentro de poco Dios ‘pondrá en el corazón’ de las autoridades políticas el deseo de volverse contra la religión falsa. Ellas “harán que quede devastada y [...] se comerán sus carnes y la quemarán por completo con fuego”. (Revelación 17:16, 17.) La religión falsa, junto con sus filosofías paganas acerca de Dios, será destruida para siempre. En esencia, Dios dirá a los practicantes de la religión falsa lo mismo que Jesús les dijo en sus días: “Su casa se les deja abandonada a ustedes”. (Mateo 23:38.)
La religión verdadera sobrevivirá a los juicios de Dios, de modo que finalmente toda la honra y gloria irá a Aquel de quien Jesús dijo que es “el único Dios verdadero”. Este es Aquel a quien identificó el salmista que declaró: “Tú, cuyo nombre es Jehová, tú solo eres el Altísimo sobre toda la tierra”. (Juan 17:3; Salmo 83:18.)
Referencias:
1. Encyclopædia Britannica, 1971, tomo 6, página 386.
2. A Short History of Christian Doctrine, por Bernhard Lohse, 1963, página 51.
3. El Magisterio de la Iglesia, por Enrique Denzinger (traducción directa de los textos originales por Daniel Ruiz Bueno), 1963, páginas 23, 24.
4. New Catholic Encyclopedia, 1967, tomo VII, página 115.
5. A Short History of Christianity, por Martin E. Marty, 1959, página 91.
6. A Select Library of Nicene and Post-Nicene Fathers of the Christian Church, por Philip Schaff y Henry Wace, 1892, tomo IV, página XVII.
7. A Short History of Christian Doctrine, página 53.
8. A Short History of Christianity, página 91.
9. The Church of the First Three Centuries, por Alvan Lamson, 1869, páginas 75, 76, 341.
10. Second Century Orthodoxy, por J. A. Buckley, 1978, páginas 114, 115.
11. New Catholic Encyclopedia, 1967, tomo VII, página 115.
12. Ibíd., tomo IV, página 436.
13. Ibíd., página 251.
14. Ibíd., página 436.
15. The New Encyclopædia Britannica, 15.a edición, 1985, Micropædia, tomo 1, página 665.
16. The Church of the First Three Centuries, página 52.
17. The Christian Tradition, por Jaroslav Pelikan, 1971, página 173.
18. Origin and Evolution of Religion, por E. Washburn Hopkins, 1923, página 339.
Los primeros tres artículos de esta serie mostraron que ni Jesús ni sus discípulos ni los primitivos Padres de la Iglesia enseñaron la doctrina de la Trinidad (La Atalaya del 1 de noviembre de 1991, 1 de febrero de 1992 y 1 de abril de 1992). Este último artículo considerará cómo se desarrolló el dogma de la Trinidad y qué papel desempeñó el Concilio de Nicea de 325 E.C.
EN EL año 325 E.C., el emperador romano Constantino convocó un concilio de obispos en la ciudad de Nicea, Asia Menor. Su objetivo era zanjar las continuas disputas religiosas sobre la relación del Hijo de Dios con el Dios Todopoderoso. Respecto a los resultados de ese concilio, la Encyclopædia Britannica dice:
¿Se debió la intervención de ese gobernante pagano a sus convicciones bíblicas? No. El libro A Short History of Christian Doctrine (Breve historia de la doctrina cristiana) declara: “Básicamente, Constantino no entendía nada de las preguntas que se hacían en teología griega”2. Lo que sí entendía era que las disputas religiosas amenazaban la unidad de su imperio, y quería zanjarlas.“Constantino mismo presidió y dirigió activamente las discusiones y personalmente propuso [...] la fórmula decisiva que expresaba la relación de Cristo con Dios en el credo que el concilio emitió, que es ‘consustancial [ho·mo·óu·si·os] al Padre’. [...] Impresionados por el emperador, los obispos —con solo dos excepciones— firmaron el credo, aunque muchos de ellos no estaban muy inclinados a hacerlo”1.
¿Estableció la doctrina de la Trinidad?
¿Estableció o confirmó la Trinidad como una doctrina de la cristiandad el Concilio de Nicea? Muchas personas suponen que así fue. Pero los hechos muestran lo contrario.
El credo que ese concilio promulgó ciertamente sostuvo varias ideas acerca del Hijo de Dios que permitirían a diversos clérigos considerarlo en cierto modo igual al Dios Padre. Sin embargo, es instructivo ver lo que no dijo el Credo de Nicea. Según se publicó originalmente, el credo entero decía:
“Creemos en un solo Dios Padre omnipotente, creador de todas las cosas, de las visibles y de las invisibles; y en un solo Señor Jesucristo Hijo de Dios, nacido unigénito del Padre, es decir, de la sustancia del Padre, Dios de Dios, luz de luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no hecho, consustancial al Padre, por quien todas las cosas fueron hechas, las que hay en el cielo y las que hay en la tierra, que por nosotros los hombres y por nuestra salvación descendió y se encarnó, se hizo hombre, padeció, y resucitó al tercer día, subió a los cielos, y ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos. Y en el Espíritu Santo”3.¿Dice este credo que Padre, Hijo y espíritu santo son tres personas en un solo Dios? ¿Dice que los tres son iguales en eternidad, poder, posición y sabiduría? No, no lo dice. No contiene ninguna fórmula de tres en uno. El Credo de Nicea original no estableció ni confirmó la Trinidad.
Como mucho, ese credo iguala al Hijo con el Padre cuando dice que el Hijo es “consustancial” a él. Pero no afirma nada parecido acerca del espíritu santo. Lo único que dice es que “creemos [...] en el Espíritu Santo”. Esa no es la doctrina de la Trinidad que enseña la cristiandad.
Ni siquiera la expresión clave “consustancial” (ho·mo·óu·si·os) quiso decir necesariamente que el concilio creía en una igualdad numérica de Padre e Hijo. La New Catholic Encyclopedia informa:
“Es dudoso que el Concilio tuviera la intención de confirmar la identidad numérica de la sustancia de Padre e Hijo”4.
Aunque el concilio hubiera querido decir que el Hijo y el Padre eran uno numéricamente, todavía no habría una Trinidad. Solo habría un Dios de dos en uno, no de tres en uno como lo precisa la doctrina de la Trinidad.
“El punto de vista de una minoría”
En Nicea, ¿creían los obispos en general que el Hijo era igual a Dios? No, había puntos de vista en conflicto. Por ejemplo, uno de ellos lo representaba Arrio, quien enseñaba que el Hijo había tenido un comienzo finito en el tiempo y por lo tanto no era igual a Dios, sino que estaba subordinado en todo sentido. Por otro lado, Atanasio creía que el Hijo era igual a Dios en cierto modo. Y había otros puntos de vista.
Martin Marty declara en cuanto a la decisión que el concilio tomó respecto a considerar que el Hijo era de la misma sustancia (consustancial) que Dios: “Nicea en realidad representó el punto de vista de una minoría; el acuerdo fue molesto e inaceptable para muchos que no compartían el parecer arriano”5. De igual manera, el libro A Select Library of Nicene and Post-Nicene Fathers of the Christian Church (Biblioteca escogida de padres nicenos y posnicenos de la iglesia cristiana) menciona que “solo una minoría adoptó la posición doctrinal formulada con claridad que contrastaba con el arrianismo, aunque tal minoría triunfó”6. Y A Short History of Christian Doctrine indica:
“Lo que a muchos obispos y teólogos del Oriente les pareció especialmente censurable fue el concepto que Constantino mismo introdujo en el credo, el homoousios [“consustancial”], que en la contienda posterior entre la ortodoxia y la herejía llegó a ser objeto de disensión”7.Las controversias perduraron después del concilio por décadas. Los que favorecían la idea de igualar al Hijo con el Dios Todopoderoso hasta cayeron en desgracia por un tiempo. Por ejemplo, Martin Marty dice de Atanasio: “Su popularidad ascendió y descendió, y se le desterró tantas veces [durante los años posteriores al concilio] que se convirtió prácticamente en un viajero que iba y venía”8. Atanasio pasó años en el destierro porque hubo funcionarios políticos y eclesiásticos que se opusieron a sus puntos de vista de que el Hijo y Dios eran iguales.
De modo que es inexacto afirmar que el Concilio de Nicea de 325 E.C. estableció o confirmó la doctrina de la Trinidad. Lo que luego llegó a ser la enseñanza de la Trinidad no existía en aquel tiempo. La idea de que el Padre, el Hijo y el espíritu santo eran cada uno el Dios verdadero y eran iguales en eternidad, poder, posición y sabiduría aunque un solo Dios —un Dios de tres en uno— no se produjo en ese concilio ni fue formulada por los primitivos Padres de la Iglesia. Como declara The Church of the First Three Centuries:
“La doctrina popular moderna de la Trinidad [...] no deriva apoyo alguno del lenguaje de Justino [Mártir]: y esta observación puede extenderse a todos los Padres Antenicenos; es decir, a todos los escritores cristianos por tres siglos después del nacimiento de Cristo. Es verdad que ellos hablan acerca del Padre, el Hijo y el Espíritu santo o profético, pero no como si fueran coiguales, ni como si fueran una sola esencia numérica, ni como Tres en Uno, en cualquiera de los sentidos admitidos ahora por los trinitarios. Precisamente lo contrario es la realidad. La doctrina de la Trinidad, como la explicaron esos Padres, era esencialmente diferente de la doctrina moderna. Afirmamos esto como un hecho tan demostrable como cualquier hecho en la historia de las opiniones humanas”.Con todo, Nicea ciertamente representó un punto de viraje. Abrió la puerta para la aceptación oficial de que el Hijo era igual al Padre, lo cual preparó el camino para el concepto posterior de la Trinidad. El libro Second Century Orthodoxy (Ortodoxia del siglo segundo), escrito por J. A. Buckley, menciona:
“Desafiamos a cualquiera para que presente a un solo escritor de renombre que, durante los primeros tres siglos, creyera en esta doctrina [la Trinidad] en el sentido moderno”9.
“Al menos hasta fines del siglo segundo, la Iglesia universal permaneció unida en un sentido básico; todos aceptaban la supremacía del Padre. Todos consideraban al Dios Padre Todopoderoso como el único supremo, inmutable, inefable y sin principio. [...]El Concilio de Constantinopla
”Con la desaparición de esos escritores y líderes del siglo segundo, la Iglesia se vio [...] deslizándose lenta pero inexorablemente hacia ese punto [...] en que en el Concilio de Nicea se alcanzó la culminación de toda esa socavación gradual de la fe original. Una pequeña minoría volátil impuso allí su herejía a una mayoría condescendiente y, con el apoyo de las autoridades políticas, coaccionó, engatusó e intimidó a los que procuraban mantener sin mancha la primitiva pureza de su fe”10.
En 381 E.C., el Concilio de Constantinopla confirmó el Credo de Nicea. Y le añadió algo. Llamó al espíritu santo “Señor y dador de vida”. El credo ampliado de 381 E.C. (que es sustancialmente el que se usa hoy en las iglesias y al que se llama “el credo niceno”) muestra que la cristiandad estaba a punto de formular un dogma trinitario desarrollado. No obstante, ni siquiera este concilio completó esa doctrina. La New Catholic Encyclopedia reconoce:
“Es interesante que, 60 años después de Nicea I, el Concilio de Constantinopla I [de 381 E.C.] evitó homoousios en su definición de la divinidad del Espíritu Santo”11.La misma enciclopedia admite: “Homoousios no aparece en la Escritura”13. No, en la Biblia no se usa esa palabra ni para decir que el espíritu santo es consustancial a Dios ni para decir lo mismo del Hijo. Esa fue una expresión no bíblica que ayudó a conducir a la doctrina no bíblica —en realidad, antibíblica— de la Trinidad.
“Hay eruditos a quienes ha desconcertado la evidente blandura de expresión de este credo; por ejemplo, la ausencia de la palabra homoousios para decir que el Espíritu Santo es consustancial al Padre y al Hijo”12.
Aun después de lo acordado en Constantinopla, pasaron siglos antes de que la enseñanza de la Trinidad se aceptara a través de toda la cristiandad. La New Catholic Encyclopedia dice: “En el Occidente [...] parece haber predominado un silencio general con respecto a Constantinopla I y su credo”14. Esta fuente muestra que el credo de ese concilio no se reconoció en todas partes del Occidente sino hasta el siglo VII o el VIII.
En círculos eruditos también se reconoce que el Credo de Atanasio, que con frecuencia se cita como definición y apoyo normales de la Trinidad, no fue escrito por Atanasio, sino por un autor desconocido mucho tiempo después. The New Encyclopædia Britannica comenta:
“La Iglesia Oriental no conoció el credo sino hasta el siglo XII. Desde el siglo XVII los eruditos en general han concordado en que el Credo de Atanasio no fue escrito por Atanasio (quien murió en 373), sino que probablemente fue compuesto en el sur de Francia durante el siglo V. [...] La influencia de ese credo parece haberse visto principalmente en el sur de Francia y en España en los siglos VI y VII. Se usó en la liturgia de la iglesia en Alemania en el siglo IX y algún tiempo después en Roma”15.Cómo se produjo
La doctrina de la Trinidad tuvo una lenta evolución durante un período de siglos. Las ideas trinitarias de filósofos griegos como Platón, que vivieron varios siglos antes de Cristo, se introdujeron furtiva y gradualmente en las enseñanzas eclesiásticas. Como dice The Church of the First Three Centuries:
“Sostenemos que la doctrina de la Trinidad fue formándose gradualmente en tiempos comparativamente tardíos; que se originó de una fuente enteramente diferente de las Escrituras judías y cristianas; que las manos de los Padres que impusieron la influencia de Platón la desarrollaron y la injertaron en el cristianismo; que en el tiempo de Justino, y mucho después, se enseñaron de manera universal la naturaleza distinta y la inferioridad del Hijo; y que entonces se había puesto de manifiesto solo la silueta vaga elemental de la Trinidad”16.Las tríadas o trinidades eran comunes en Babilonia y Egipto antes de Platón. Y los esfuerzos de los eclesiásticos por atraer a los incrédulos del mundo romano llevaron a la incorporación gradual de algunas de esas ideas al cristianismo. Esto condujo con el tiempo a que se aceptara la creencia de que el Hijo y el espíritu santo eran iguales al Padre.
La misma palabra “Trinidad” solo se aceptó paulatinamente. En la segunda mitad del siglo segundo, Teófilo, obispo de Antioquía de Siria, escribió en griego e introdujo la palabra tri·ás, que significa “tríada” o “trinidad”. Luego el escritor latino Tertuliano, de Cartago, en el África septentrional, introdujo en sus escritos la palabra trinitas, que significa “trinidad”. Pero la palabra tri·ás no se encuentra en las Escrituras Griegas Cristianas inspiradas, y la palabra trinitas no se halla en la traducción latina de la Biblia conocida como la Vulgata. Ninguna de esas expresiones era bíblica. Pero la palabra “Trinidad”, basada en conceptos paganos, se introdujo furtivamente en la literatura de las iglesias, y después del siglo IV llegó a ser parte de su dogma.
Por eso, no se trata de que los eruditos hubieran examinado la Biblia cabalmente para ver si en ella se enseñaba esa doctrina. Más bien, la política seglar y la eclesiástica determinaron en gran parte la doctrina. En el libro The Christian Tradition (La tradición cristiana), el autor, Jaroslav Pelikan, llama la atención sobre “los factores no teológicos de la controversia, muchos de los cuales parecían estar listos vez tras vez para determinar su resultado, solo para que los contrapesaran otras fuerzas de igual importancia. A menudo la doctrina pareció ser la víctima —o el producto— de la política eclesiástica y de conflictos de personalidad”17. El señor E. Washburn Hopkins, profesor de Yale, lo expresó así: “La definición ortodoxa final de la trinidad fue en gran parte un asunto de política eclesiástica”18.
¡Qué irrazonable es la doctrina de la Trinidad en comparación con la enseñanza bíblica sencilla de que Dios es supremo y no tiene igual! Como dice Dios: “¿A quién me asemejarán ustedes o me harán igual o me compararán, para que nos parezcamos uno al otro?”. (Isaías 46:5.)
Qué representó
¿Qué representó la evolución gradual del concepto de la Trinidad? Fue parte de la apostasía del cristianismo verdadero que predijo Jesús. (Mateo 13:24-43.) El apóstol Pablo también había predicho la apostasía venidera:
“Vendrá tiempo en que no soportarán la enseñanza sana, sino que, llevados del propio capricho, se rodearán de maestros para que les halaguen el oído, y dejarán de escuchar la verdad, volviéndose de nuevo a los mitos”. (2 Timoteo 4:3, 4, La Biblia, versión católica de Serafín de Ausejo.)
Uno de esos mitos fue la enseñanza de la Trinidad. Algunos otros mitos ajenos al cristianismo que también se produjeron gradualmente fueron: la inmortalidad inherente del alma humana, el purgatorio, el limbo y el tormento eterno en un infierno de fuego.
Entonces, ¿qué es la doctrina de la Trinidad? En realidad es una doctrina pagana que se hace pasar por cristiana. Satanás la fomentó para engañar a la gente con el fin de que les pareciera que Dios era confuso y misterioso. Esto lleva a que las personas también estén más dispuestas a aceptar otras ideas religiosas falsas y prácticas incorrectas.
“Por sus frutos”
En Mateo 7:15-19 Jesús dijo que se podía distinguir entre la religión falsa y la religión verdadera de este modo:
“Guárdense de los falsos profetas que vienen a ustedes en ropa de oveja, pero por dentro son lobos voraces. Por sus frutos los reconocerán. Nunca se recogen uvas de espinos o higos de cardos, ¿verdad? Así mismo, todo árbol bueno produce fruto excelente, pero todo árbol podrido produce fruto inservible [...]. Todo árbol que no produce fruto excelente llega a ser cortado y echado al fuego”.
“Si alguno hace la declaración: ‘Yo amo a Dios’, y sin embargo está odiando a su hermano, es mentiroso. Porque el que no ama a su hermano, a quien ha visto, no puede estar amando a Dios, a quien no ha visto. Y este mandamiento lo tenemos de él, que el que ama a Dios esté amando también a su hermano”.
Aplique el principio fundamental de que los cristianos verdaderos tienen que amarse entre sí a lo que ocurrió en ambas guerras mundiales de este siglo, así como en otros conflictos. Personas de las mismas religiones de la cristiandad se encontraron en los campos de batalla y se mataron unas a otras por diferencias nacionalistas. Cada lado alegó que era cristiano y recibió el apoyo de sus clérigos, quienes afirmaron que Dios estaba de su lado. Tal matanza de un “cristiano” por otro “cristiano” es fruto podrido. Es una violación del amor cristiano, un rechazo de las leyes de Dios. (Véase también 1 Juan 3:10-12.)
Un día de ajuste de cuentas
Así que, el que se apostatara del cristianismo no solo llevó a creencias impías, como la doctrina de la Trinidad, sino también a prácticas impías. Sin embargo, habrá un día de ajuste de cuentas, pues Jesús dijo: “Todo árbol que no produce fruto excelente llega a ser cortado y echado al fuego”. Por eso la Palabra de Dios exhorta:
“Sálganse de ella [la religión falsa], pueblo mío, si no quieren participar con ella en sus pecados, y si no quieren recibir parte de sus plagas. Porque sus pecados se han amontonado hasta llegar al cielo, y Dios ha recordado sus actos de injusticia”. (Revelación 18:4, 5.)
Dentro de poco Dios ‘pondrá en el corazón’ de las autoridades políticas el deseo de volverse contra la religión falsa. Ellas “harán que quede devastada y [...] se comerán sus carnes y la quemarán por completo con fuego”. (Revelación 17:16, 17.) La religión falsa, junto con sus filosofías paganas acerca de Dios, será destruida para siempre. En esencia, Dios dirá a los practicantes de la religión falsa lo mismo que Jesús les dijo en sus días: “Su casa se les deja abandonada a ustedes”. (Mateo 23:38.)
La religión verdadera sobrevivirá a los juicios de Dios, de modo que finalmente toda la honra y gloria irá a Aquel de quien Jesús dijo que es “el único Dios verdadero”. Este es Aquel a quien identificó el salmista que declaró: “Tú, cuyo nombre es Jehová, tú solo eres el Altísimo sobre toda la tierra”. (Juan 17:3; Salmo 83:18.)
Referencias:
1. Encyclopædia Britannica, 1971, tomo 6, página 386.
2. A Short History of Christian Doctrine, por Bernhard Lohse, 1963, página 51.
3. El Magisterio de la Iglesia, por Enrique Denzinger (traducción directa de los textos originales por Daniel Ruiz Bueno), 1963, páginas 23, 24.
4. New Catholic Encyclopedia, 1967, tomo VII, página 115.
5. A Short History of Christianity, por Martin E. Marty, 1959, página 91.
6. A Select Library of Nicene and Post-Nicene Fathers of the Christian Church, por Philip Schaff y Henry Wace, 1892, tomo IV, página XVII.
7. A Short History of Christian Doctrine, página 53.
8. A Short History of Christianity, página 91.
9. The Church of the First Three Centuries, por Alvan Lamson, 1869, páginas 75, 76, 341.
10. Second Century Orthodoxy, por J. A. Buckley, 1978, páginas 114, 115.
11. New Catholic Encyclopedia, 1967, tomo VII, página 115.
12. Ibíd., tomo IV, página 436.
13. Ibíd., página 251.
14. Ibíd., página 436.
15. The New Encyclopædia Britannica, 15.a edición, 1985, Micropædia, tomo 1, página 665.
16. The Church of the First Three Centuries, página 52.
17. The Christian Tradition, por Jaroslav Pelikan, 1971, página 173.
18. Origin and Evolution of Religion, por E. Washburn Hopkins, 1923, página 339.
17 comentarios:
COMENTARIO CONTRA LOS QUE BLASFEMAN DICIENDO “LA DOCTRINA SATANICA Y DIABOLICA DE LA TRINIDAD
¡¡¡ UNICITAROS !!! ¡¡¡ NO SOY YO SOLO, SINO YO Y EL QUE ME ENVIO EL PADRE !!!
(Juan 8:16-18)
CUANDO MEDITAMOS EN LA SIGUIENTE CITA BIBLICA
-Señor, digno eres de recibir la gloria y la honra y el poder; porque “ TU ” creaste todas las cosas, y por “ TU” voluntad existen y fueron creadas.- (Apocalipsis 4:11)
Nos damos cuenta que solo Dios creó todas las cosas, porque “ TU ” está en singular; lo cual demuestra que los Angeles, los Querubines, Serafines, Arcángeles, Prinsipados y Potestades “NO PUEDEN CREAR” sino que ellos fueron creados por Dios.
Pero la Biblia enseña que DIOS dijo:
“HAGAMOS” al “HOMBRE” a “NUESTRA IMAGEN”, conforme a NUESTRA SEMEJANZA.” (Génesis 1:26) (Génesis 5:1) (Santiago 3:9)
¿Por qué dijo: ? “HAGAMOS” (plural) si solo “EL” es creador?. Luego sigue diciendo: “ A NUESTRA IMAGEN, conforme NUESTRA SEMEJANZA
Si Dios me hizo a su imagen y semejanza y la Biblia me enseña que “YO” soy una Trinidad:
“Y todo vuestro “SER”: ESPIRITU, ALMA Y CUERPO, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo. (1 Tesalonicenses 5:23).
Evidentemente, noto, ¡¡¡ y claramente !!!, que todo mi “SER” está compuesto por “TRES” entidades que son independientes una de otra, porque dice que se requiere que todo mi “SER” (espiritu, alma y cuerpo) sea hallado irreprensible para recibir a Cristo. CONCLUYO entonces que “YO” SOY UNA TRINIDAD.
Si Dios me hizo a su imagen y semejanza, (y YO soy una TRINIDAD) entonces, es evidente que también TODO el “SER” de DIOS también es una TRINIDAD: PADRE, VERBO Y ESPIRITU SANTO.
La Biblia me enseña que todo mi “SER” puede ser separado sin dejar de ser “YO” Por Ejemplo:
“mi cuerpo puede ser separado de mi Alma” (Mateo 10:28; 1 Reyes 17:21-22)
“mi Alma puede ser separada de mi espiritu” (Hebreos 4:12; 1 Corintios 2:11; Proverbios 20:27; Zacarías 12:1) (2 Reyes 2:9)
Y cada una de mis partes son independientes y con carácteres “PERSONALES” sin dejar de ser “YO”
El cuerpo de “Nilbia”, el alma de “Nilbia” y el espiritu de “Nilbia”, que intrinsecamente componen “TODO MI SER”.
Y es bíblico que un espiritu tiene dependencia propia (1 Reyes 22:21-22) (2 Crónicas 18:20-21) (proverbios 20:27) (1 Corintios 2:11) (Zacarías 12:1)
PUES DE LA MISMA MANERA ES DIOS: “PADRE” “VERBO” Y “ESPIRITU SANTO, SIN DEJAR DE SER UN SOLO DIOS. Tal y como nos hizo a cada uno de nosotros a su imagen y semejanza; cada “UNO” de nosotros es “UNA TRINIDAD”, (espíritu, alma y cuerpo). Asi mismo es Dios siendo uno es: Padre, Verbo y Espiritu Santo.
NUESTRO DIOS AL IGUAL QUE CADA UNO DE NOSOTROS ES UNA “TRINIDAD”. DIOS ES: PADRE, VERBO Y ESPIRITU SANTO. Y NOSOTROS SOMOS: ESPIRITU, ALMA Y CUERPO
(1 Tesalonisenses 5:23). EL NOS HIZO A SU IMAGEN Y SEMEJANZA (Génesis 1:26).
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EL TERMINO “DIOS HIJO” Y “DIOS ESPIRITU SANTO” NO EXISTE EN LA BIBLIA. ESTO SOLO LO USAN LOS TRINITARIOS Y UNICITARIOS QUE NO CONOCEN A DIOS. LO CORRECTO ES DECIR: “EL VERBO DE DIOS” NUNCA “DIOS HIJO” ;
TAMPOCO SE DEBE DECIR: “DIOS ESPIRITU SANTO” ESTOS TERMINOS SOLO CONFUNDEN LA VERDAD Y SE PRESTAN PARA DAR LA IMPRESION DE QUE SON TRES DIOSES; Y ESTO NO ES VERDAD; Y ESTO LO APROVECHAN LOS INDOCTOS UNICITARIOS PARA RIDICULIZAR A LOS INDOCTOS TRINITARIOS.
En la biblia nunca Jamás aparece el Termino “Dios Padre fue manifestado en carne” Solo dice: “Dios fue manifestado en carne” está hablando del “Verbo de Dios ” el cual no estimó el ser igual a Dios (el Padre) como cosa a que aferrarse, sino que se despojó asi mismo tomando forma de siervo hecho semejante a los hombres; y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. Por lo cual Dios (EL PADRE) también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para que en el nombre de Jesús (EL VERBO) se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo (EL VERBO) es el Señor, para gloria de “DIOS PADRE”.
Venido el cumplimiento del tiempo Dios (el Padre) envió a su Hijo (El Verbo) nacido de mujer, bajo la Ley, a fin de redimír a los que estaban bajo la Ley, y nosotros recibiécemos la adopción de hijos.
EL QUE FUE ENCARNADO NO FUE EL PADRE SINO EL VERBO, el cual mediante EL ESPÍRITU ETERNO se ofreció a sí mismo sin mancha a Dios (El Padre). Todas las cosas por él (el Verbo) fueron hechas, y sin él (el Verbo) nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.
EL QUE FUE CRUCIFICADO NO FUE EL PADRE SINO EL VERBO (el que “ERA”, el cordero, La Luz, La Vida Eterna la cual “ESTABA” (pasado, antes) con el PADRE, y se nos manifestó);
EL TERMINO HIJO SOLO SURGE CUANDO DIOS POR MEDIO DEL PROFETA NATAN, LE HACE EL JURAMENTO A DAVID que de su descendencia en cuanto a la carne levantaría al Cristo, para que se siente en su trono para siempre; ESTE MESIAS LE SERIA POR “HIJO” A EL; Y EL LE SERIA POR “PADRE” (1 Crónicas 17:11-14.)
(1 Cronicas 17:11-14.) - Y cuando tus días sean cumplidos para irte con tus padres, levantaré descendencia después de ti, a uno de entre tus hijos, y afirmaré su reino. El me edificará casa, y yo confirmaré su trono eternamente. YO LE SERE POR PADRE, Y EL ME SERA POR HIJO; y no quitaré de él mi misericordia, como la quité de aquel que fue antes de ti; sino que LO CONFIRMARE en mi casa y en mi reino ETERNAMENTE, Y SU TRONO SERA FIRME PARA SIEMPRE.
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A PARTIR DE ESTE JURAMENTO (Salmos 89:3-4; 89:34-36; 132:11) Hechos 2:30; 13:34-35) etc. etc., David y los profetas escribíeron por el Espíritu los padecimientos de Cristo y de su gloria venidera.
EL VERBO UNA VEZ ENCARNADO ADQUIRIO EL TERMINO DE HIJO.
El Verbo siendo en forma de Dios no estimó el ser igual a Dios (EL PADRE) como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres;
y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. Por lo cual Dios (EL PADRE) también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para que en el nombre de JESUS (el VERBO) se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que JESUCRISTO (el VERBO) es el Señor, para gloria de DIOS PADRE.
El VERBO se despojó de todo atributo igual al PADRE (Filipenses 2:6) haciendose igual a nosotros, y cuando fue niño comió mantequilla y miel hasta que aprendiera a desechar lo malo y escoger lo bueno (Isaías 7:14-16) y por todo lo que padeció, aprendió la obediencia (Hebreos 5:8)
y actualmente el VERBO sigue siendo UN HOMBRE SANTO E INOCENTE PERO GLORIFICADO POR EL PADRE; en calidad de Sumo Sacerdote inmortal e incorruptible, intercediendo por todos los que por medio de él (el Verbo) se acercan a Dios (el Padre) (Romanos 8:34) (Hebreos 7:25; 9:24).
Y el PADRE le ha dado “TODA POTESTAD” en los cielos y en la tierra (Mateo 28:18); y “ él ” (el Verbo) es el único mediador entre Dios (el Padre) y los hombres “Jesucristo HOMBRE”; fíjese que dice “JESUCRISTO HOMBRE” no dice “JESUCRISTO ESPIRITU” sino “JESUCRISTO HOMBRE” de CARNE, HUESOS y SANGRE (1 Juan 5:6) (Lucas 24:39) (Juan 20:27) etc. etc. etc.
EL VERBO una vez encarnado se humilló hasta lo sumo en obediencia al PADRE; Y estando en “ LA CONDICION DE HOMBRE ” (Filipenses 2:6) porque fue hecho un poco menor que los ángeles (Hebreos 2:7); Dios el Padre le preparó cuerpo al Verbo (Hebreos 10:5) (Salmos 40:6-7) y el ESPIRITU SANTO es TESTIGO de que Jesucristo (el Verbo) vino mediante agua y sangre y no solamente de agua sino de agua y sangre (1 Juan 5:6); y aquel verbo fue hecho carne (Juan 1:14) y habitó entre los hombres.y es por tal razón que Jesucristo siendo el VERBO de DIOS y ESTANDO EN LA CONDICION DE HOMBRE PODIA DECIR:
- porque El Padre MAYOR es que yo (Juan 14:28).-
- Pero de aquel día y de la hora nadie sabe, ni aun los ángeles que están en el cielo, “NI EL HIJO”, sino el Padre. (Marcos 13:32)
- No me toques, porque aún no he subido a mi Padre; mas ve a mis hermanos, y diles: Subo a mi Padre y a vuestro Padre, A MI DIOS y a vuestro Dios. (Juan 20:17) etc. etc. etc.
Y siempre se refería al Padre como “MI PADRE” (Mateo 7:21; 10:32-33; 11:27; 16:17; etc) (Lucas 10:22; 24:49; etc) (Juan 5:17; 8:49,54; 14:23; 15:1 etc) (Apocalipsis 2:27; 3:5,21;) etc. etc. etc. etc.
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EL VERBO HECHO CARNE ES EL CUMPLIMIENTO DEL JURAMENTO QUE DIOS HIZO A DAVID por medio del profeta NATAN (1 Cronicas 17:11-14) (2 Samuel 7:12-16) (Salmos 89:3-4; 89:34-37; 132:11)
“David siendo profeta, y sabiendo que CON JURAMENTO DIOS LE HABIA JURADO que de su descendencia, en cuanto a la carne, levantaría al Cristo para que se sentase en su trono, viéndolo antes, habló de la resurrección de Cristo (el Verbo) que su alma no fue dejada en el Hades, ni su carne vio corrupción (Hechos 2:30-31) (Salmos 16:10). Y en cuanto a que el PADRE por el ESPIRITU (Romanos 8:11) resucitó al VERBO en la carne para nunca mas volver a corrupción fue profetizado de esta manera “OS DARE LAS MISERICORDIAS FIELES DE DAVID” ((Hechos 13:34-35)
Por causa del JURAMENTO de DIOS a David, el VERBO permanecerá en la carne para siempre en “GLORIA” (1 Timoteo 3:16) (Lucas 24:26; 9:26) (Mateo 25:31) (Juan 12:16) etc. etc.
Cuando el Apóstol Juan habla del VERBO en su evangelio, lo pone en el tiempo pasado usando el sustantivo “ERA”
“En el principio “ERA” el Verbo, y el Verbo “ERA” con Dios, y el Verbo “ERA” Dios. ..... “Este” (el Verbo) “ERA” en el principio con Dios (el Padre) (Juan 1:1-2).
connotando así “quién” era el Verbo antes de ser encarnado.
EL QUE FUE ENCARNADO NO FUE EL PADRE SINO EL VERBO, el cual es Dios (1 Timoteo 3:16).
Porque todo el “SER” de Dios es: PADRE, VERBO Y ESPIRITU SANTO “ semejante a nosotros “espiritu, alma y cuerpo” (una trinidad intrínseca) y cada una con identidad personal independientes; conformando un solo “SER”.
Y aquel VERBO “fue hecho carne”, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del PADRE) (Juan 1:14); “Lo que “ERA” desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos contemplado, y palparon nuestras manos tocante al VERBO DE VIDA .” (1 Juan 1:1). “porque la VIDA (Jesucristo, Juan 14:6) fue manifestada, y la hemos VISTO, y testificamos, y os anunciamos LA VIDA ETERNA, LA CUAL -ESTABA- (pasado) CON EL PADRE, (no está hablando del Padre sino del Verbo) y se nos manifestó. Lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos, para que también vosotros tengáis comunión con nosotros; y nuestra comunión verdaderamente es con el PADRE, y con su HIJO JESUCRISTO (el VERBO)” (1 Juan 1:2-3). Todas las cosas por “ él ” (el Verbo) fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho (Juan 1:10) En el mundo estaba, y el mundo por él (el Verbo) fue hecho; pero el mundo no le conoció (Juan 1:3). “Estaba vestido de una ropa teñida en sangre; y su nombre es: EL VERBO DE DIOS” (Apocalipsis 19:13)
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EL QUE NO TIENE AL ESPIRITU DE DIOS NO TIENE AL HIJO ( Romanos 8:9 ) Y EL QUE NO TIENE AL HIJO NO TIENE AL PADRE ( 1 Juan 2:23 ) Y EL QUE NO TIENE A UNO DE LOS TRES NO TIENE A NINGUNO.
-Mas vosotros no vivís según la carne, sino según el ESPIRITU (el Espiritu Santo), si es que el Espiritu de DIOS (el Padre) mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espiritu de CRISTO (el Verbo), no es de él.- ( Romanos 8:9 ).
1 Juan 2:23: Todo aquel que niega al Hijo (EL VERBO), TAMPOCO TIENE AL PADRE. El que confiesa al Hijo (el Verbo), tiene también al Padre.
Si tú no tienes el “ESPIRITU” de Cristo, no tienes a CRISTO, y al no tener a Cristo, pues, tampoco tienes al PADRE. EN OTRAS PALABRAS: El que no tiene a UNO de los TRES, no tiene a NINGUNO
Los que hablan decomedidamente de la TRINIDAD, están blasfemando de uno de ellos, del Espíritu Santo. Porque cuando se expresan diciendo: “La doctrina Satánica o diabólica de la trinidad” están incluyendo al Espíritu Santo el cual es naturaleza divina de Dios; y la blasfemia contra el Espíritu Santo nunca será perdonada.
JESUS ES DIOS (Juan 20:28) -Entonces Tomás respondió Y le dijo: ¡SEÑOR mío, Y DIOS mío!.-
Jesús no lo negó, ni le reprochó
EL HIJO (el Verbo) SIENDO DIOS NO ES EL PADRE
CRISTO RECURRIO A LA LEY PARA PROBAR QUE “ EL ” NO ERA SOLO
-Y si yo juzgo, mi juicio es verdadero; porque NO SOY YO SOLO, sino YO y el que me envió, EL PADRE. Y en vuestra ley está escrito que el TESTIMONIO DE DOS hombres es verdadero. Yo soy el que doy TESTIMONIO de (mí mismo), y el PADRE que me envió da TESTIMONIO de (mí).- (Juan 8:16-18)
Fíjese que el VERBO daba testimonio de si mismo y el PADRE que lo envió dio testimonio de él (el Verbo) (dos testigos como la Ley lo requiere)
SI JESUS FUERA EL MISMO PADRE LE ESTARIA MINTIENDO A LOS JUDIOS
Porque ellos le decían: -Tú das testimonio acerca de ti mismo; tu testimonio no es verdadero (Juan 8:13)
Con solo estos versículos (Juan 8:16-18) quedan sepultados los “Jesús solo” o “Unicitarios” y todas las iglesias de la unidad o (los del nombre) La respuesta de Cristo (el Verbo) debería de darle reflexión a los unicitarios, porque ellos se llaman “LOS JESUS SOLO” y el mismo Cristo que ellos profesan conocer, les dice: “NO SOY YO SOLO” sino YO y el que me envió, EL PADRE (Juan 8:16-18)
En la “Ley” Por el dicho de dos o de tres testigos la persona era enjuiciada y podia hasta morir; no moría por el dicho de UN SOLO TESTIGO.... El testimonio de los testigos es de suma importancia para emitír juicio tanto en la Ley como en la gracia (Dios no puede mentir ni transgredir su palabra ni su Ley
Ver: (Deuteronomio 17:6; 19:15) (Números 35:30) (Mateo 18:16) (1 Timoteo 5:19) etc. etc.
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EL ESPIRITU SANTO También es TESTIGO del VERBO HECHO CARNE, y lo dijo de esta manera:
-Este es Jesucristo (el Verbo), que vino mediante agua y sangre; no mediante agua solamente, sino mediante agua y sangre. Y el ESPIRITU ES EL QUE DA TESTIMONIO; porque el Espíritu es la verdad. (1 Juan 5:6). Fíjese que dice que “ da ” Testimonio (presente continuo)
Ahora no son solo “ DOS ”sino “TRES” los que dan TESTIMONIO: “JESUCRISTO (EL VERBO), EL PADRE QUE LE ENVIO Y EL ESPIRITU SANTO”.
1 Juan 5:9: Si recibimos el testimonio de los hombres, “MAYOR” es el testimonio de DIOS (el Padre); porque este es el testimonio con que Dios (EL PADRE) ha TESTIFICADO acerca de su HIJO (el Verbo).
seguir incistiendo en la doctrina de “los Jesús solo” es hacer mentiroso a Dios y los mentirosos jamás entrarán en el reino de los cielos.
DIOS NO PUEDE MENTIR NI TRANSGREDIR SU PALABRA NI SU LEY (Juan 8:16-18)
MAS EJEMPLOS DEL VERBO COMO “PERSONA” EN RELACION AL PADRE
1) Hebreos 10:5-10. -Por lo cual, entrando en el mundo (el Verbo) dice: Sacrificio y ofrenda no quisiste; Mas ME PREPARASTE CUERPO. Holocaustos y expiaciones por el pecado no te agradaron. Entonces dije (EL VERBO): He aquí que vengo, oh Dios (el Padre), para hacer tu voluntad, (Como en el rollo del libro está escrito de mí. Diciendo primero: Sacrificio y ofrenda y holocaustos y expiaciones por el pecado no quisiste, ni te agradaron (las cuales cosas se ofrecen según la ley), y diciendo luego: He aquí que vengo, oh Dios, para hacer tu voluntad; quita lo primero, para establecer esto último. En esa voluntad (LA DEL PADRE) somos santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo (EL VERBO) hecha una vez para siempre.
2) Porque el mismo David dijo por el ESPIRITU SANTO:
Dijo el Señor (el PADRE) a mi Señor (el VERBO): Siéntate a mi diestra, Hasta que ponga tus enemigos por estrado de tus pies. (Salmos 110:1) (Marcos 12:36) (Lucas 20:42) (Hechos 2:34) (Hebreos 1:13) (Hechos 2:25) etc. etc.
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- El que está sentado a la diestra de Dios el Padre: NO ES UNA MANIFESTACION o parusia; O UNA APARIENCIA o fantasma;
- TAMPOCO ES EL PADRE HACIENDO EL PAPEL DEL HIJO AL MISMO TIEMPO (simultaneamente). ( como piensan los unicitarios). Sino que es: LA “PERSONA” DE JESUCRISTO (el Verbo) EL HIJO DE DIOS RESUCITADO ; UNA PERSONA DE CARNE Y HUESOS Y SANGRE CON LAS CICATRICES DE LOS CLAVOS EN SUS MANOS Y EN SU COSTADO;
- ES EL JURAMENTO CUMPLIDO, QUE DIOS JURO POR SU “SANTIDAD” A DAVID;
- ES EL VERBO DE DIOS HECHO CARNE; el cual reinará visible en el trono de DAVID como se lo JURO DIOS (el PADRE) A DAVID SU SIERVO.
El que está a la diestra de la Majestad en los cielos es el VERBO de DIOS; un hombre glorificado, incorruptible e inmortal de CARNE y HUESOS y SANGRE “INTERCEDIENDO” por nosotros como SUMO SACERDOTE a la diestra de Dios (EL PADRE). Porque no entró Cristo (EL VERBO) en el santuario hecho de mano, figura del verdadero, sino EN EL CIELO MISMO PARA PRESENTARSE AHORA POR NOSOTROS ante DIOS (EL PADRE); (Hebreos 9:24). Y el Padre le dio toda “POTESTAD” al HIJO (el VERBO). (Mateo 28:18)
EN 1 Timoteo 3:16. dice: “DIOS FUE MANIFESTADO EN CARNE”. NO FUE EL PADRE QUIEN FUE ENCARNADO SINO EL VERBO DE DIOS, EL CUAL ES DIOS (Juan 1:1,14; 20:28) Y TAMPOCO FUE EL PADRE EL QUE FUE CRUCIFICADO, SINO EL HIJO (EL VERBO) (Juan 3:16).
“ TESTIGOS ENTRE SI ”
EL ESPIRITU SANTO DANDO TESTIMONIO DEL VERBO,
y no está hablándose o refiriéndose a si mismo como si fuera una misma manifestación:
“Este es Jesucristo (el Verbo), que vino MEDIANTE AGUA Y SANGRE; no mediante agua solamente, sino MEDIANTE AGUA Y SANGRE. Y el ESPIRITU es el que (DA) TESTIMONIO; porque el ESPIRITU es la VERDAD.” (1 Juan 5:6).
Aquí el Espiritu Santo está dando testimonio, no de si mismo sino de otro (del Verbo hecho carne), por lo tanto, aunque en la deidad son uno, sin embargo no son dos manifestaciones al mismo tiempo de una misma persona. (como creen los unicitarios)
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LOS APOSTOLES OYERON EL TESTIMONIO DEL PADRE
SOBRE SU HIJO (EL VERBO)
“Porque no os hemos dado a conocer el poder y la venida de nuestro Señor Jesucristo (el Verbo) siguiendo fábulas artificiosas, sino como “habiendo visto con nuestros propios ojos su majestad”. Pues cuando él (el VERBO) recibió de DIOS PADRE honra y gloria, le fue enviada desde la magnífica gloria una voz que decía: ESTE ES MI HIJO AMADO, EN EL CUAL TENGO COMPLACENCIA. Y nosotros “oímos esta voz ENVIADA del cielo”, cuando estábamos con “ él ” (el Verbo) en el monte santo”. (2 Pedro 1:17) (Mateo 3:17; 17:5) (Marcos 9:7) (Lucas 9:35).
Aquí el PADRE testifica del Hijo (el VERBO) Y también los apóstoles testifican, DEMOSTRANDO QUE NO SON LA MISMA PERSONA (como creen los unicitarios).
EL VERBO TESTIFICANDO DEL ESPIRITU SANTO
“Pero cuando venga el Espíritu de verdad, “ él ” os guiará a toda la verdad; porque NO HABLARÁ POR SU PROPIA cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, Y OS HARA SABER las cosas que habrán de venir” (Juan 16:13).
“El me glorificará; porque tomará de lo mío, Y OS LO HARÁ SABER” (Juan 16:14).
“Todo lo que tiene el Padre es mío; por eso dije que “ tomará ” de lo mío, Y OS LO HARÁ SABER” (Juan 16:15)
Fíjese que el Espiritu Santo no hablará “POR SU PROPIA CUENTA” lo cual demuestra, que es una persona con dependencia propia. (porque oye, habla, etc. etc.)
TODO EL “SER” DE DIOS, ES: PADRE, VERBO Y ESPIRITU SANTO ¡¡¡ ALELUYA !!!!.
Y nosotros fuimos hechos a su imagen y semejanza; todo nuestro “SER” es: espiritu, alma y cuerpo.
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EL ESPIRITU SANTO ES DIOS EN Isaias 6:5-12 QUIEN HABLA ES JEHOVA PERO EN
Hechos 28:25-27 EL APOSTOL PABLO DICE QUE QUIEN HABLO FUE EL ESPIRITU SANTO
-Entonces dije: ¡Ay de mí! que soy muerto; porque siendo hombre inmundo de labios, y habitando en medio de pueblo que tiene labios inmundos, han visto mis ojos al Rey, JEHOVA DE LOS EJERCITOS. Y voló hacia mí uno de los serafines, teniendo en su mano un carbón encendido, tomado del altar con unas tenazas; y tocando con él sobre mi boca, dijo: He aquí que esto tocó tus labios, y es quitada tu culpa, y limpio tu pecado. Después OI LA VOZ DEL SEÑOR, que decía: ¿A quién enviaré, y quién irá POR NOSOTROS? Entonces respondí yo: Heme aquí, envíame a mí. Y dijo: Anda, y di a este pueblo: Oíd bien, y no entendáis; ved por cierto, mas no comprendáis. Engruesa el corazón de este pueblo, y agrava sus oídos, y ciega sus ojos, para que no vea con sus ojos, ni oiga con sus oídos, ni su corazón entienda, ni se convierta, y haya para él sanidad.Y yo dije: ¿Hasta cuándo, Señor? Y respondió él: Hasta que las ciudades estén asoladas y sin morador, y no haya hombre en las casas, y la tierra esté hecha un desierto; hasta que Jehová haya echado lejos a los hombres, y multiplicado los lugares abandonados en medio de la tierra-
AHORA EN (Hechos 28:25-27) EL APOSTOL PABLO DICE
QUE QUIEN HABLO FUE EL ESPIRITU SANTO
-Bien habló EL ESPIRITU SANTO por medio del profeta Isaías a nuestros padres, diciendo: -Ve a este pueblo, y diles: De oído oiréis, y no entenderéis; Y viendo veréis, y no percibiréis; Porque el corazón de este pueblo se ha engrosado, Y con los oídos oyeron pesadamente,Y sus ojos han cerrado, Para que no vean con los ojos, Y oigan con los oídos, Y entiendan de corazón, Y se conviertan, Y yo los sane.-
EL ESPIRITU SANTO SIENDO DIOS NO ES EL PADRE
Hechos 19:2 - les dijo: ¿Recibisteis el Espíritu Santo cuando creísteis? Y ellos le dijeron: Ni SIQUIERA HEMOS OIDO SI HAY ESPÍRITU SANTO.- Estas personas conocían a Jehová el Dios de Israel porque ellos habían recibido primeramente el bautizmo de Juan, pero desconocían al Espíritu Santo;
Luego, fueron bautizados en el nombre de Jesús, y habiéndoles impuesto Pablo las manos, VINO SOBRE ELLOS EL ESPIRITU SANTO.
EL VERBO ES SEMPITERNO IGUAL AL PADRE
Colosenses 1:17: Y él es “ANTES DE TODAS LAS COSAS”, y todas las cosas en él subsisten.
Con esto probamos que el VERBO es SEMPITERNO IGUAL AL PADRE.
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EL ESPIRITU SANTO ES SEMPITERNO IGUAL AL PADRE.
Hebreos 9:14: ¿cuánto más la sangre de Cristo (EL VERBO), “el cual” mediante el ESPIRITU ETERNO se ofreció a sí mismo sin mancha a Dios (EL PADRE), limpiará vuestras conciencias de obras muertas para que sirváis al Dios vivo?
Con esto probamos que EL ESPIRITU SANTO es SEMPITERNO IGUAL AL PADRE.
¡Gloria a Dios!
NO NECESITAMOS DEL CONCILIO DE NICEA, NI DEL CONCILIO DE CONSTANTINOPLA, NI TEOLOGIA MODERNA; NI FILOSOFIA; NI CONOCER SABELIANISMO O MODALISMO; NI ARRIANISMO; NI CONOCER DE LOS ESCRITOS PRENICENICOS; NI LOS ESCRITOS DE ATANASIO; NI DE MUCHA HERMENEUTICA Y APOLOGETICA. etc. etc.
SOLAMENTE NECESITAMOS LA ESPADA DEL ESPIRITU QUE ES LA PALABRA DE DIOS; PARA DAR RESPUESTA A TODOS LOS OPONENTES, DICIENDO ESTO:
“ QUE ASI COMO CADA UNO DE NOSOTROS ES UNA TRINIDAD (ESPIRITU, ALMA Y CUERPO) (1 Tesalonicenses 5:23)
ASI MISMO ES NUESTRO DIOS UNA TRINIDAD (PADRE, VERBO Y ESPIRITU SANTO)
(1 Juan 5:7)”
LA TRINIDAD DE DIOS ES TOTALMENTE APOSTOLICA; AUTENTICAMENTE APOSTOLICA; EN GRAN MANERA APOSTOLICA.
NOTECE COMO LOS APOSTOLES RECONOCEN CONCOMITANTEMENTE (UNO TRAS OTRO) LA TRINIDAD DEL INALCANSABLE E INESCRUTABLE DIOS UNICO
2 Corintios 13:14. -La gracia del Señor JESUCRISTO (el Verbo de Dios), el amor de DIOS (el Padre), y la comunión del ESPIRITU SANTO (el Espíritu de Dios) “sean” (plural) con todos vosotros. Amén.- (Fíjese que: (sean está en plural, en vez de sea para singular) está connotando la inter-relación entre tres y la co-relación de los tres en gracia, amor y comunión para con nosotros.)
Romanos 15:30. -Pero os ruego, hermanos, por nuestro SEÑOR JESUCRISTO (el Verbo) y por el amor del ESPIRITU (el Espíritu Santo), que me ayudéis orando por mi a DIOS (el Padre).-
Judas 20-21. -Pero vosotros, amados, edificandoos sobre vuestra santísima fe, orando en el ESPIRITU SANTO (el Espíritu de Dios), conservaos en el amor de DIOS (el Padre), esperando la misericordia de nuesro Señor JESUCRISTO (el Verbo de Dios) para vida eterna.-
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2 Tesalonicenses 2:13-14. -Pero nosotros debemos dar siempre gracias a Dios respecto a vosotros hermanos amados por el Señor, de que DIOS (el Padre) os haya escogido desde el principio para salvación, mediante la santificación por el ESPIRITU (el Espíritu de Dios) y la fe en la verdad, a lo cual os llamó mediante nuestro evangelio, para alcanzar la gloria de nuestro Señor JESUCRISTO (el Verbo).-
1 Juan 5:7. -Porque tres son los que dan testimonio en el cielo: El PADRE, El VERBO y el ESPIRITU SANTO, y estos TRES SON UNO.- (de aquí se deduce la palabra Trinidad)
Mateo 28:19. -Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del PADRE, y del HIJO (el Verbo), y del ESPIRITU SANTO (el Espíritu de Dios).-
Marcos 12:36. -Porque el mismo David dijo por el ESPÍRITU SANTO (el Espíritu de Dios): Dijo el “Señor” (EL PADRE) a mi “Señor” (EL HIJO (el Verbo de Dios). Siéntate a mi diestra, Hasta que ponga tus enemigos por estrado de tus pies.-
Juan 14:26. -Mas el Consolador, el ESPÍRITU SANTO (el Espíritu de Dios), a quien el PADRE enviará en MI NOMBRE (el Verbo), “él” (el Espíritu de Dios) os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que “YO” (el Verbo) os he dicho.-
Lucas 2:26: Y le había sido revelado por el ESPÍRITU SANTO (el Espíritu de Dios), que no vería la muerte antes que viese al Ungido (EL HIJO (el Verbo) del “Señor” (EL PADRE).-
Hechos 10:38: cómo DIOS (el Padre) ungió con el ESPÍRITU SANTO (el Espiritu de Dios) y con poder a JESUS de Nazaret (el Verbo de Dios), y cómo éste anduvo haciendo bienes y sanando a todos los oprimidos por el diablo, porque DIOS (el Padre) estaba con “él” (el Verbo).-
Mateo 12:28: Pero si YO (el Verbo) por el ESPÍRITU (el Espiritu Santo) de DIOS (el Padre) echo fuera los demonios, ciertamente ha llegado a vosotros el reino de Dios.
Hechos 7:55: Pero Esteban, lleno del ESPÍRITU SANTO (el Espiritu de Dios), puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a JESÚS (el Verbo) que estaba a la diestra de DIOS (el Padre).-
1 Corintios 6:11. -Y esto erais algunos; mas ya habéis sido lavados, ya habéis sido santificados, ya habéis sido justificados en el nombre del Señor JESÚS (el Verbo de Dios), y por el ESPÍRITU (el Espiritu Santo) de nuestro DIOS (el Padre).-
Hechos 5:31-32. - A “éste” (JESUS (el Verbo)), Dios ha exaltado con su diestra por Príncipe y Salvador, para dar a Israel arrepentimiento y perdón de pecados. Y nosotros somos TESTIGOS suyos de estas cosas, y también el ESPIRITU SANTO (el Espiritu de Dios), “el cual” (pronombre para persona) ha dado DIOS (el Padre) a los que le obedecen.-
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Juan 15:26-27. -Pero cuando venga el Consolador, a quien “YO” (el Verbo) os enviaré del PADRE, el ESPIRITU de verdad, “el cual” (pronombre para persona) “procede” (no es creado) del PADRE, “él” (pronombre personal) dará TESTIMONIO acerca de “Mi” (el Verbo). Y vosotros daréis TESTIMONIO también, porque habéis estado conmigo desde el principio.-
1 Pedro 1:2. -Elegidos según la presciencia de DIOS PADRE en santificación del ESPIRITU (el Espiritu Santo), para obedecer y ser rociados con la sangre de JESUCRISTO (el Verbo de Dios).-
Hebreos 9:14-15. -¿Cuánto más la sangre de CRISTO (el Verbo de Dios), el cual mediante el ESPIRITU ETERNO (el Espiritu de Dios) se ofreció a si mismo sin mancha a DIOS (el Padre), limpiará vuestras conciencias de obras muertas para que sirváis al DIOS vivo?.-
Hebreos 10:29. -¿Cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el que pisoteare al HIJO (el verbo) de DIOS (el Padre), y tuviere por inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado, e hiciere afrenta al ESPIRITU de gracia (el Espiritu Santo)?.-
Efesios 2:18. -Por que por medio de “El” (JESUS (el Verbo), los unos y los otros tenemos entrada por un mismo ESPIRITU (el Espiritu Santo) al PADRE.-
Juan 1:32-34. - .... “ése” es el que bautiza con el ESPIRITU SANTO y yo le ví, y he dado TESTIMONIO de que “éste” (el Verbo) es el HIJO de DIOS (el Padre).-
Mateo 3:16,17. - ..... y vió al ESPIRITU (el Espiritu Santo) de DIOS (el Padre) que descendía como paloma y venia sobre “él” (el Verbo); y hubo una voz de los cielos (la del Padre) que decía: este es mi HIJO amado (al Verbo) en quien tengo complacencia.-
Hechos 2:32-33. -A este JESUS (el Verbo) resucitó DIOS (el Padre), de lo cual todos nosotros somos TESTIGOS. Asi que, exaltado por la diestra de Dios, y habiéndo recibido del Padre la promesa del ESPIRITU SANTO (el Espiritu de Dios), ha derramado esto que vosotros véis y oís.-
1 Corintios 12:4-6. -Ahora bien, hay diversidad de dones, pero el ESPIRITU (el Espiritu Santo) es el mismo. Y hay diversidad de ministerios pero el SEÑOR (el Verbo) es el mismo. Y hay diversidad de operaciones, pero DIOS (el Padre) que hace todas las cosas en todos, es el mismo.-
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Colosenses 2:2-3. -para que sean consolados sus corazones, unidos en amor, hasta alcanzar todas las riquezas de pleno entendimiento, a fin de conocer el “MISTERIO” DE DIOS (el Padre), y de CRISTO (el Verbo), “en quien” (singular en la deidad de todo el ser de Dios) “están” (plural en la unidad) “escondidos” (plural en la trinidad) “todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento”.
“ ¡Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos! Porque ¿quién entendió la mente del Señor? ¿O quién fue su consejero? ”
Nosotros somos de Dios; el que conoce a Dios nos oye; el que no conoce a Dios no nos oye. En esto conocemos el espíritu de verdad y el espíritu de error.
¡ A DIOS SEA LA GLORIA !
POSDATA
Asi como los edificadores desecharon la piedra que vino a ser cabeza del ángulo (Salmos 118:22) (Mateo 21:42) (Marcos 12:10) (Lucas 20:17) (Hechos 4:11) (1 Pedro 2:7) ;
Así y de la misma manera la cita biblica 1 Juan 5:7 que consideraron como: “LA CITA APOCRIFA” es la ESPINA DORSAL de todo el “SER” de DIOS.
- Porque tres son los que “DAN” (presente contínuo) TESTIMONIO en el cielo “EL PADRE, EL VERBO Y EL ESPIRITU SANTO” Y “ESTOS TRES” “SON UNO”. (1 Juan 5:7).
Nuestro Dios al igual que cada uno de nosotros es una “TRINIDAD”. toda la deidad de Dios es: Padre, Verbo y Espíritu Santo. Y nosotros somos: espíritu, alma y cuerpo (1 Tesalonisenses 5:23)
Esta es la razón por la cual DIOS dijo: “Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza (Génesis 1:26).
TODA PERSONA QUE TIENE EL “ESPIRITU SANTO” RECONOCE QUE JESUCRISTO (el Verbo) ES EL HIJO DE DIOS Y QUE FUE RESUCITADO POR EL “PADRE” (Romanos 10:9-10; 8:11) DIOS NO ES DIOS DE CONFUSION.
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ASI COMO EL APOSTOL PABLO entregó a Himeneo y a Alejandro a Satanás para que aprendan a no blasfemar (1 Timoteo 1:20),
ASI MISMO Y DE IGUAL MANERA ES REPROBADO EL PAYASO DE LAS 21 TESIS POR BLASFEMO, y todos los que como él han maldecido y blasfemado del ESPIRITU SANTO junto con el VERBO y el PADRE, cuando insultan todo el bendito “SER” de DIOS diciendo: “La doctrina Satánica o Diabólica de la TRINIDAD”.
las incongruencias de los unicitarios es en gran manera abrumante, desconcertante y herética.
Aunque hayan cientos de iglesias unicitarias en el mundo, esta doctrina es falsa y herética llevando a muchos - Líderes - al infierno por mentirosos (digo - Líderes - porque la mayor parte de las ovejas son inocentes). la apostacía es gigante y mundial.
¡¡¡ A DIOS SEA LA GLORIA !!!
Amigo Anónimo, disculpe usted que difiera de su conclusión y su fanatismo. La verdad es que Pablo no esta tratando sobre NUESTRA CONFORMACIÓN o constitución , sino de que TODO NUESTRO SER SEA LIMPIO . Cuando el Apóstol y Dios mismo dan testimonio,de nuestra constitución usan apropiadamente el relato del Génesis que describe con exactitud como fue creado el Hombre. Y amigo, Anónimo , NUNCA SE DICE QUE ESTEMOS FORMADOS por tres "entidades" sino que Dios formó al Hombre del polvo del suelo y sopló en sus narices ALIENTO DE VIDA. Ahora ,para variar , por favor amigo dinos donde queda el alma o el espíritu en esta "TRINIDAD" que tu dices . (Gen 2 : 7 ; 1 Cor 15 : 45 )
Estoy totalmente de acuerdo con Anónimo. No se necesita del concilio de Nicea ni de Constantinopla ni nada por el estilo. Solo se necesita de la autoridad de Dios, su palabra (La biblia).
Entonces tu crees cien por ciento en la Palabra que Jesús hablo ¿ verdad ? Si tu consideras que Jesús es algo ¿ que piensas de esto que dijo? :
Juan 8 : 17 También, en la propia Ley de ustedes está escrito: ‘El testimonio de dos hombres es verdadero’. 18 Yo soy quien doy testimonio acerca de mí mismo, y el Padre que me envió da testimonio acerca de mí”.
¿ No se distingue al Padfre y al Hijo como DOS HOMBRES QUE DAN TESTIMONIO? Si ambos son DIOS ¿ no son acaso dos dioses ? Y si son dos DIOSES ¿ cual de ellos es el UN SOLO DIOS que enseñó Pablo en 1 COR 8 . 6-8 ?
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